jueves, 13 de octubre de 2011

Silue



Entonces,
Ella
Le dibujaría una sonrisa coqueta
Con su blusa entre abierta

Invitando
A pasar el aire
Que circula en este cálido
Otoño.

Yo,
Le desabotonaría
Los tres siguientes
Y respiraría profundamente

Me guardaría la proeza
Y me refugiaría
Entre sus pechos

Batiría el silencio
Y dejaría
Escapar el murmullo
Bajo su aliento.

Ahí,
También se
Ser feliz

Pero prefiero
Tu cuello
Y reposo mi rostro

Y te beso lento
Te respiro
Te siento…

Continua



Gilberto Fernández



lunes, 10 de octubre de 2011

Cuando Vez Nada


Cuando Vez Nada

Parece que fue ayer,
Y hoy,
Seguirá como mañana
Parece que fui
Solo un sueño
Y me esfumo con el alba.
Parece que se es
O que tan solo fui
O peor,
Que soy a un
Y no,
Nunca fui nada.
Parece,
Que se renace
Y reabro mis ojos!
Pero los cierro de nuevo
Cuando tú
Los abres,
Y duelen
Cuando no vez nada
Que es,
Casi siempre.


Gilberto Fernández

viernes, 7 de octubre de 2011

Huellas



Lloverían cientos de años
Para desgastar
La huella de tu estela
Bajo esa tenue luz
Se formaría de nuevo tu silueta
Y entre las coplas de otoño
Renacerías de nuevo
De entre las letras
Aquellos versos
Los que provocaste
Cuando cruzaste
Por mi vía

Gilberto Fernández

miércoles, 5 de octubre de 2011

Estela de Luz



Dejo espacios abiertos
Solo algunas palabras
En un estado vibratorio.

Hay varios disturbios
Tras esa estela
De sensaciones fugaces

Mi garganta se seca
Y detras de este espejo
No logro reencontrarme
Mucho menos tras tu ventana.

Sé que soy más
Conflictivo que perspicaz
Mas vago que poeta

Pero se acariciar
Y besar una mano
Y tocar tu corazón
Con toda esa ternura
Que guarda mi ser

También se mirar
Con la única sinceridad
Que a un conservan mis ojos

No se mentir,
mas nadie me cree

Pero lo que más se hacer
Es estar ausente de la vida misma
Y de los lugares
Que me han abrazado a distancia.

A pesar de ello.
Hoy paro y re escarbo
En mi caja de sueños
Aquellos,
que fui olvidando
Al paso de los años

Cuando era más fuerte
Y lograba más cosas
Con tan solo pensarlo y sentirlo.

Gilberto Fernández